lunes, 4 de julio de 2011

Llegamos a los 5km

Estuve sin correr dos semanas por distintas razones. Una noche tomé fuerzas y fui. Yendo en el auto hasta la avenida donde corro pensé en intentar los 5 km. seguidos. Hasta ese momento no había hecho más de 3 km sin parar. Muchas veces había hecho 5km pero con tramos caminando. Otra hecho es que no había podido correr hasta el momento media hora de corrido. El máximo tiempo sin parar habían sido 15 min. Generalmente mis entrenamientos consistían, como ya lo he dicho, en alternar tiempos caminando y corriendo, hasta completar media hora.
Pero ese día lo iba a intentar. Para empezar fui muy lento. Iba trotando a una velocidad no mucho mayor a la que hubiera tenido caminando. Eso fue hasta que entré en calor, mas o menos un kilómetro. Me di cuenta que por primera vez no me sentí cansado al hacer los primeros 500 mts, algo que me sucedió siempre. Comenzaba a correr y en menos de 500 mts ya sentía que no podía más, tenía un "muro" al comienzo, una vez superado eso podía seguir el entrenamiento hasta la media hora. Pero como digo, ese día, supongo que por empezar muy lento, no tuve ese cansancio del comienzo. De esto saco una conclusión: debería precalentar antes de entrenar.
La avenida en donde entreno tiene desde donde comienzo, 2,5 km haciendo ida y vuelta. Debía hacer dos veces el recorrido para completar 5 km. Al terminar la primer ida, es decir el primer cuarto de mi recorrido, estaba entero con fuerzas para seguir y totalmente decidido a completar los 5 km, aunque con las expectativa de si lo iba a poder hacer. Seguí, completé la mitad del recorrido. Y al comenzar otra vez el recorrido, sabía que al estar haciendo un poco más de 3 km recorridos iba a enfrentarme a una pequeña pendiente en ascenso. En ese momento, sabiendo con anticipación que iba a ser difícil, regulé la velocidad y otra vez empecé con el trote casi caminando, me permitió terminar el ascenso sin sentir que me falte el aire, pero por primera vez, y ya completado más de 3,5 km empecé a sentir dolor de cansancio en las piernas. Como dije, era la primera vez que lo experimentaba tan fuerte. No eran calambres ni contracturas, era un dolor de cansancio, de agotamiento, difícil de describir pero inconfundible. Completados los 4 km ya sabía que iba a terminar el recorrido. Estaba cansado, pero mi voluntad era muy grande. En ese mismo momento empecé a experimentar que el aire que respiraba no me alcanzaba. Otra vez bajé la velocidad. Pero iba feliz, lo iba a lograr. Faltando 500 mts y cuando ya veía el lugar donde se cumplían mis 5 km no cambié de ritmo, no intenté hacer un sprint final ni nada parecido. El objetivo eran los 5 km y no un récord de velocidad. Llegué! Detuve el cronómetro en 32'49''. Esto debe sonar a un horror para los corredores experimentados. Pero fue mi primera vez, es mi marca, mi meta cumplida, mi propia carrera ganada para mi mismo.
Una vez cumplido el objetivo, seguí caminando 500 mts más. Las piernas se me aflojaban por momentos y en ocasiones parecía que querían seguir corriendo. Tenía la sensación como si yo las estuviera frenando. Finalmente, le dediqué mucho tiempo y concentración a la elongación.
Al día siguiente me sentí cansado de verdad, sin calambres y con dolores musculares no muy fuertes, pero estaba cansado.
De ahora en más, tengo que afianzar lo que logré. Repetirlo unas 10 veces por lo menos, para fortalecerme en ello. Y luego pensaré en mejorar, en planificar otro entrenamiento y en fijarme otros objetivos.